sábado, 15 de marzo de 2008

EL NOVIO DE MERTXE

Buenas noches amados, por fin mi amo se ha largado a ver la tele y yo he podido coger el portátil y a vacilar por la red. La verdad es que como hoy es sábado los colegas digitales están más bien sosos, pero yo erre que erre, me debo a mi público y soy una perrita profesional.
Hoy quiero hablar de una amiga de mis amos, amiga de esas de la infancia de mi ama, osea de esas amistades que son absolutamente indestructibles, como sólo somos capaces de cimentarlas las hembras. Los machos son más erráticos y lo suyo normalmente es más de bar, de borrachera tonta, de cenas colesterólicas, de "Marca", de hablar de tías y de no comerse nada. Las nuestras son amistades como dios manda, no gilipolleces de taberna o de puti-club.
Mi amo en ocasiones puede llegar a ser un tanto imbécil, sí como suena y os voy a hacer una demostración documentada. En su época, osea cuando era más jóven y no el vejestorio que es ahora, le dió por vacilar a la buena de Mertxe con el rollo de que si se buscaba un novio Ertzaina, y ella con el esoticismo y la sabiduría de las feminas, a tragar al baboso hasta que se aburriera.
Mertxe de momento está soltera, como Isabel, su otra amiga del alma. La soltería es una decisión tan personal que debe ser respetada, sobre todo por denotar sabiduría. No hay que más que darse una vuelta para ver el personal masculino que circula sin correa no bozal, el 99% no dan la talla, ni como personas cuerdas ni menos en las dimensiones que se suponen mínimas del miembro, ese rabo que están todo el día tocando. Supongo que os habreís fijado que los tios no se cortan ni un pelo a la hora de arrascarse las pelotas, colocarse la polla y demás magreos, que resultan más propios de su condición de onanistas pajeros que de personas educadas. Tienen que tener las manos con un olor permanente a bacalao y con ese perfume se piensan que pueden anonadar a cualquier mujer, a mi más bien me parece todo lo contrario y además me extraña que no pillen más enfermedades, pues con las manos perfumadas de sudor inglinal se meten un pincho de tortilla de patata de esa hecha con guevina al body con dos cojones. En fin será que están inmunizados.
Volviendo al tema que nos ocupa, el de la soltería, es para mí un ejercicio vital de cordura, tanto o más como lo puede ser el casamiento, o su versión más extendida el multienlace en los juzgados, el ayuntamiento como parejas de hecho y en ocasiones de cohecho, la relación homosexual, los tríos desaforados o las orgías, aunque estos últimos estadios me parece que nasti de nasti. En la misma línea los intercambios de pareja, que cosa más absurda follar con alguién mientras ves como se follan a tu supuesta pareja, una estupidez y una guarrada, se mire como se mire.
Yo pienso quedarme soltera, como Mertxe e Isabel, me lo montaré cuando me de la gana, como quiera y con quien quiera y si no pillo, pues tan feliz. Lo triste es lo de los hombres, sobre todo las especies de los divor y de los solterones, los primeros buscan braga para maridar como sea, sin ningún tipo de criterio y pegan unas barrilas que te cagas, chicas, guardaros de un coñazo de esa subespecie. Los solterones son esos tipos que no han pillado nada en su puta vida, que de vez en cuando practican en el puti, aunque las más de las veces al solitario, estos suelen acabar amulatados o enrusizados, pero les dura lo mismo que la cuenta corriente, o se piensan que las chicas somos gilis.
En fin queridas Mertxe e Isabel, sois un cielo, guapas de verdad, así que ni puto caso a los tios malasombra como mi amo, vosotras, como yo, a lo nuestro, que la vida merece la pena vivirla y sin casamiento, pues también.
También os quiero pedir, pues sé que mi amo es buena persona, que ese pecadillo de juventud le sea perdonado. Lo doy por ya realizado.
Un beso y la próxima vez que aparezcaís por el pueblo, un paquete de salchicas cada una.
Ser buenas.

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