

A otra cosa mariposa, ayer pillé en la red la foto de una costumbre, mala práctica, que se puede ver en Bolivia, dos señoras en un ring (que no es un timbre) dándose de bofetadas, tirones de pelos y patadas en el coño para goce y disfrute de una multitud de machitos locales embrutecidos. ¡Qué asco, tía revolcadas por el suelo sacudiéndose la badana para disfrute de unos descerebrados! Por lo visto a algunos colegas les pone, es decir les empalma, ver a chicas pegándose públicamente. En los países más "civilizados" el espectáculo se sirve en bikini (que no es un bocadillo) y en un barrizal donde dos bizarras y bellas gladiadoras se sacuden ante la morbosidad del personal. Para mí, que me peleo con todas las perritas que pillo, pero no por placer ni por morbo, sólo por ese instinto de protección hacia mis amos, me parece una humanilada el boxeo y este tipo de espectáculos en los que la peña disfruta con el dolor ajeno que se producen dos contendientes, da igual que sean machos o hembras, por cuatro duros. Debería estar penado, con cárcel, el promover y lucrarse con estas actividades salvajes.
En fin queridas, de participar en estas luchas de gladiadores del siglo XXI cero, pero también chicas que no os vea en ningún combate de boxeo de machos, tenemos que ser consecuentes. Es mejor decicarse a promocionar la dieta vegetariana que a revolcarse por el barro, por lo menos es más sano.
Un beso, voy a sobar, que con la huelga de hambre tengo más sueño que el copón.
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