Buenos días amados, vaya agobio con la crisis de los humanos, no paran los tíos de dar el coñazo.
No entiendo como eran ricos, los del norte y no todos, en Julio y ahora llega la hecatombe. La verdad es que yo no he notado diferencia entre el verano y el presente, me siguen dando la misma mierda de pienso todos los días. Pero algo debe pasar para que mi amo haya dejado de ir al bar. El tío no hace más que repetir que estamos en “economía de guerra”, ya ni cena, se come dos manzanas y a rular. Lo único que no ha dejado es de fumar y de comprar libros, así que como no se corte en estos vicios, el segundo muy saludable, me parece que tendrá que comer papel y ceniza.
Ayer vimos una peli, “mamá cumple 100 años” y del día anterior la de “la escopeta nacional”. Cierto es que el cine español es diferente, pero también recurrente, sobre todo a la hora de proyectar situaciones absurdas. ¿Tan difícil será hacer una peli normal? Pues parece que sí. Mi amo se emociona cuando ve en pelotas a la Bárbara Rey y a la Amparo Muñoz de hace 30 años, se pone el querubín nostálgico. Yo como soy una perrita no dicen nada esas señoras, pero he de reconocer que eran mujeres guapas per se, sin operaciones ni artificios, por eso cuando se desnudan se puede decir con propiedad que se ponen tal y como Dios las trajo al mundo. Muchas de las contemporáneas no podrían decir lo mismo.
Las película que no me gusta nada es esa en color negro, monocroma realidad de la explotación de la mujer, sea consentida o no. Tampoco ver a los animales enjaulados.
Por el contrario adoro la amistada, el cariño y la música popular, ruidosa, estruendosa, armoniosa en el jolgorio colectivo.
Bueno, os dejo, veremos que peli me pone el jefe hoy. Ahora le ha dado por ahí, veremos cuanto le dura.
Un beso coleguitas.
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