Buenos días amados, dicen los de la radio que viene la nieve. Yo lo siento por mi amo que tiene que andar todo el santo día con el coche arriba y abajo, pero a mí me encanta. Frida ya está helada, es el problema que tiene ser una esclava de línea, como ella es una galga aristocrática, pues que se joda por la servidumbre que tiene para con la línea. Para mí que está anoréxica, aunque también es cierto que todos los galgos son más bien flacos. En cambio Hera, como es una goleen, no tiene problemas con el frío, su abrigo de suave lana la protege y además como está más bien rellenita, que no gorda, pues de puta madre.
La peña de la radio son también unos tipos de lo más curiosos, yo de vez en cuando me conecto a las tertulias. Es cojonudo lo que saben esos señores y señoras. Lo mismo largan sobre economía, derecho, fútbol, sexo y hasta medicina. En mi perruna opinión es que hablan por hablar, nadie, ni siquiera yo que soy la perrita podenco más inteligente desde la época de lo faraones soy capaz de tamaño alarde de sapiencia. También resulta paradójico como una misma noticia tiene enfoques diametralmente opuestos, dependiendo de que dial se sintonice. Para mí que estas gentes repiten, mecánicamente, el mensaje que les dictan sus amos, tienen por tanto menos libertad que la que pueda gozar cualquier perrito atado a su caseta.
Ayer mi amo se puso otra vez melancólico, esta vez a cuenta de Alfredo Landa. ¿Qué quien es este señor? Pues según mi amo un genio, un actor de los que ya no quedan. No dice lo mismo de las actrices, le pirran todas las chavalas monas, aunque sean más sosas que una calabaza.
Yo por mi cuenta me he documentado y he llegado a una conclusión, mi amo es como todos los personajes que ha representado Alfredo Landa, pero mezclados. Así que haceros una idea de la paciencia que tengo que tener, no me explico como mi ama le aguanta. En ocasione se pone en plan sargento, pero es adorable, como los mandos chusqueros que tuvo en la mili, gente de mucho genio, mucho taco, más vino y tabaco, pero buenas gentes. Otras es tan simple como los santos inocentes y hasta se queda cataléptico con las milanas. También se vuelve el cuello al paso de un recia moza, cualquier día se jode un vértebra, perro ladrador poco mordedor. Y siempre es un gran amante de los animales, del campo, de la simpleza, de hablar con la gente anónima, de hurgar en eso que llama la intrahistoria.
Por lo tanto queridas os recomiendo ver una peli de Alfredo Landa, en ella seguro que aparece vuestra media naranja, en la vida más vale una buena persona que un buen personaje, y de estos últimos hay un porrón.
Un beso y os propongo coger a vuestro chico y buen polvote nivoso.
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